sábado, 6 de febrero de 2010

CORTEJO



Un mono con chaqueta de brocado

trota y brinca delante de ella,
que arruga un pañuelo de encaje
en su mano enguantada con arte

mientras que un negrito todo de rojo
mantiene con los brazos los vuelos
de su pesado vestido en suspenso,
atento al pliegue que se mueve;

el mono no pierde de vista
la garganta blanca de la dama,
opulento tesoro que reclama
el torso desnudo de uno de los dioses;

el negrito a veces levanta
más alto de lo necesario, el granuja,
su fardo suntuoso, a fin
de ver eso con lo que por la noche sueña;

ella baja las escaleras
del todo insensible
al sufragio insolente
de sus animales familiares.



Paul Verlaine (Francia, Metz, 1844 - París,1896)

(Traducción: Ramón Hervás)
CORTÉGE

Un signe en veste de brocart
Trotte et gambade devant elle
Qui froisse un mouchoir de dentelle
Dans sa main gantée avec art,

Tandi qu'un négrillon tout rouge
Maintient à tour de bras les pans
De sa lourde robe en suspens,
Attentif à tout pli qui bouge;

Le singe ne perd pas des yeux
La gorge blanche de la dame,
Opulent trésor que réclame
Le torse nú de l'un des dieux;

Le négrillon parfois soulève
Plus haut qu'il ne faut, l'aigrefin
Son fardeau somptueux, afin
De voir ce dont la nuit il rêve;

Elle va par les escaliers
Et ne paraît pas davantage
Sensible à l'insolent suffrage
De ses animaux familiers

No hay comentarios:

Publicar un comentario