domingo, 4 de abril de 2021

EL PICO DE LOS PÁJAROS

 











Queremos acceder al vuelo.
 
Un deseo se asemeja a la dirección
hacia la cual nos movemos
y escapamos de la orfandad,
veloces.
 
Un pájaro herido. Un pájaro huérfano.
Sus plumas cambian cada día,
se eleva apenas puede.
 
La forma que toma eso amado,
hecho carne,
se sostiene con tu mano
al vaivén del viento.
 
 
¡No tiene brazos, no tiene brazos al principio de la mañana!
No comprende la mecánica
del músculo,
juega con la liviandad
de un papel
haciendo círculos
hasta que su imaginación indica
dónde,
cómo, qué.
 
 
Es el pico. Su hueso frontal. Su contacto con los objetos alrededor del cuerpo. La hechura. Determina un lugar en las especies. Bebe. Toma el aire, se irá, alguna vez, hacia adentro y
 
hacia fuera
           recorre,
             sostiene el agua. Sostiene ese pequeñísimo acto.
                                                                                                        
 
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Temblor
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Aveces hace así: con un solo ojo observa una rama.
Y la rama se mece y le provoca un temblor.
 
Cuentan que hace miles de años otra paloma fue
                                         /lanzada en medio del diluvio.
Regresó con gajos de olivo de tierra cercana.
Está escrito.
 
Ahora un minúsculo animal se asombra por primera vez
ante la naturaleza;
crea un árbol,
el cielo,
las hojas entregando la sombra.
Divino pájaro del mito
aunque éste
real y terrestre
se pierda en las tormentas
y nos deje vacíos.
Ciertas mosquitas revolotean alrededor
de los granos que fermentan,
el agua hizo su tarea
de espera,
ser alimento de paloma.
La casa se transforma, una pajarera
donde intercambiamos olores
y horas secas o
húmedas,
sueltas o en rincones,
de ave tierna
desplumándose
contra cualquier pronóstico
saldrá.
Sus semanas como años,
un nombre
como los humanos bendicen
a los seres pequeños
sobre los que se imponen,
 
llegará a construir su hogar
en el mismo sitio del primer nido,
gritará ¿ven? puedo recordar todo.
 
(Del libro: “El pico de los pájaros”,
Barnacle, 2021, envío de
Verónica Vega)
 
Catalina Boccardo (Buenos Aires, 1961)
 
 
Publicó: El jardín santo (En Danza, 2011), Territorios (Del Dock, 2012), Collage (En Danza, 2015) Formosa (Suri Porfiado, 2015), El viaje y el ombligo (Plaquette, Ed. Yaugurú, Uruguay, 2017) Elementos y otros títulos en formato de Cuadernos (La  Mariposa y la Iguana-Cuadernos, 2013-2014), Punto Ciego en formato de E-book (Biblioteca las G. Naciones, País Vasco, 2017) Bailar (publicado parcialmente), Sangrar (microrrelato) participación en libro objeto, Cuarta Edición del Museo de Arte Carrillo Gil (Ed.(c)acto ediciones, México, 2012) y El pico de los pájaros (Barnacle, 2021).
 
 
IMAGEN: Pichón de torcaza, de Pinterest (Sin mención de créditos)



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