Hay quien escribe poemas
en un muro y luego se despide, tira
la carbonilla a un lado - I. Gruss
Esto no es sí mismo poético
El dueño de casa tiene puesto un pantalón
Azul y anda en cueros, mientras
Sus ayudantes lo hacen sin importarles
La lluvia, el sol
Que en algún momento caerá
Beben cerveza, descansan sus manos en la cintura
Lo auspicioso de la juventud es eso
Tener fe en levantar una pared
Fuera de toda las consideraciones que ella representa
Un día, una tarde
Medida en la espuma que calma la sed
De a poco veo cada vez menos de ellos, crece
La hilera de ladrillos, rojos de plenitud
Son ladrillos huecos, como nuestra existencia
Ahora mi vecino ha prendido un cigarrillo
Y fuma diestramente a la par que con la otra mano
Mezcla con la cuchara dentro del balde
Es admirable como la ceniza se incorpora a la vida
A una forma de la vida
Y estará en esa pared escribiendo con su fuego extinto
Todo el silencio del poema
(Inédito, 2012; gentileza
del autor)
Hugo Luna (Concepción del Uruguay, Entre Ríos, Argentina, 1959)
muchas gracias Marcelo... amigo poeta!
ResponderEliminarMás poeta será Ud.!, querido Luna.
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