sábado, 22 de agosto de 2020

EL AMOR DE CHILE (1987)







































Del amor de Chile, del amor de todas las                             
cosas que de norte a sur, de este                           
a oeste se abren y hablan                           
Los torrentes y los nevados que se tocan                            
y hablan amándose porque en este mundo                       
todas las cosas hablan de amor;                              
las piedras con las piedras y los pastos                 
con los pastos                  
Porque así se aman las cosas, las playas,                             
los desiertos, las cordilleras, los               
bosques de más al sur, los glaciares y                    
todas las aguas que se abren tocándose                              
Para que tú las veas se abren                    
Sólo para que tú lo escuches Chile se                    
levanta               
Sólo para que tú y yo no miremos                          
por todo el horizonte, si mira                    
se levantan



Todas las cosas cantan bajo el cielo

Querido cielo de mi país

Cantan las cumbres de los Andes, los pastos,                    
el desierto de Atacama, los grandes ríos,                            
canales y aguas del sur, Pacífico, nevados                          
y glaciares                          
cantan y cantan
Las aves, las bandadas y nieves de las cimas,                     
garzas, loicas                    
y las aves más lóbregas de los pequeños de                      
alma cantan                      
Canta el día radiante y el día nublado, el                             
vuelo de las inmaculadas praderas, de las                           
montañas y los archipiélagos del amor                 
más helado cantan                        
Como todas las cosas cantan y cantan                  
Sólo porque están vivas cantan                
cantan y cantan                              
bajo el cielo de mi país



Las parejas reunidas largan su amor frente a las aguas
  
Señor, ante el torrente de las almas que aquí
van pasando
nosotros dos, boteros de estos ríos, te pedimos
que sostengas nuestro amor
tal como sostienes estas aguas corriendo
Y que cuando mi alma y la tuya
se desvanezcan entre los sueños y los mundos
que nuestro abrazo siga creciendo
más vasto que las mareas y más lento
Y que cuando al fin todo se vaya
tras las corrientes, cauces y ríos
que todavía
que todavía se escuchen los gritos de nuestro amor
acompañando el pulso de los remos sobre el agua.



Guárdame en ti

Amor mío: guárdame entonces en ti
en los torrentes más secretos que tus ríos levantan
y cuando ya de nosotros
sólo quede algo como una orilla
tenme también en ti
guárdame en ti como la interrogación de las aguas
que se marchan
Y luego, cuando las grandes aves se derrumben
y las nubes nos indiquen
que se nos fue la vida entre los dedos
guárdame todavía en ti
tenme en ti, en la brizna de aire que aún ocupe tu voz
dura y remota
como los cauces glaciares en que la primavera desciende

 De La vida nueva, 1994



Raúl Zurita



Raúl Zurita. Poeta chileno. Nació en Santiago, en 1950 . Hijo de madre italiana, el italiano fue prácticamente su primera lengua y nutrió su propia obra. Estudió en el Liceo Lastarria, ingresando posteriormente a Ingeniería Civil en la Universidad Técnica Federico Santa María de Valparaíso. Obtuvo la Beca Guggenheim y se desempeño como Profesor de Literatura en la California State University. Después del golpe militar estuvo preso en un barco de la Armada, experiencia que también se refleja en su obra, donde concibe la literatura como la posibilidad de hablar y crear después del dolor y la tortura, donde la palabra no es posible. En la década del 70 realizó varios actos que provocaron polémica, como quemarse el rostro e intentar cegarse, con lo cual quería expresar la impotencia frente a la realidad y la necesidad de decir sin palabras. Ha realizado numerosas "acciones de arte”, como escribir poemas en el cielo de Nueva York con humo lanzado por aviones; en el desierto de Chile grabó el verso "ni pena ni miedo", que puede ser leído desde el cielo. Fue Agregado Cultural de Chile en Italia, durante el gobierno de don Patricio Aylwin, y actualmente reside en Chile. Gracias a una beca de la Fundación Andes estuvo dos años en el sur, entre Temuco y Coyhaique; allí escribió otra obra, donde los protagonistas son los ríos de Chile. Se relacionó también con poetas mapuches y su cultura; reconoce como uno de sus maestros al poeta chileno Juan Luis Martínez. Su obra ha sido traducida a varios idiomas, entre ellos al ingles, francés, alemán, ruso, sueco, griego, árabe y se le considera uno de los grandes poetas chilenos de su generación. Poesía publicada: El sermón de la montaña -1971- Áreas verdes -1974. - Purgatorio - 1982 - Anteparaíso- 1983-Canto a su amor desaparecido (1985), El amor de Chile -1994, La vida nueva (1994), Canto de los ríos que se aman (1995), Poemas militantes (2000), entre otras obras. Ha obtenido las becas Guggenheim y Andes, el Premio Pablo Neruda y, en 2000, el Premio Nacional de Literatura, entre muchas otras distinciones. INRI fue editado por Mansalva, en 2013; año en el que también publicó:   Nuevas ficciones, relatos, LOM Ediciones, Santiago. Otras obras:  Tu vida rompiéndose, antología personal, Editorial Lumen, Santiago / Barcelona, 2015;  Obra poética 1979-1994. Edición de Benoit Santini, 2 t. Colección Archivos de la Universidad de Poitiers., 2017; y en el mismo año:  Verás, antología, selección y prólogo del poeta Héctor Hernández Montecinos, Ediciones Biblioteca Nacional y  La vida nueva, versión final, Editorial Lumen, Santiago / Barcelona, 2018.






No hay comentarios:

Publicar un comentario