No deseo hablar con alguien que ha escrito más libros de los que ha leído.
martes, 30 de julio de 2024
viernes, 26 de julio de 2024
COMO UN CEREZO AL MEDIODÍA
Quisiera morir antes que tú
porque, lo sabes, no soportaría
la idea de quedarme solo
para ocuparme de tus agaves
y por la noche poner la mesa
solo para mí.
Hagamos una competencia
de quien muere primero entonces.
Yo podría contar las ovejas
hasta el día
del sueño eterno,
o podría morir
en una tarde de lluvia
como esta
ahogándome en un charco,
o en los momentos difíciles
dentro de un vaso de agua.
Tú quizás
no tendrías paz,
me buscarías entre las sábanas
de nuestra cama sin tender,
o más allá de las cortinas
de ciudades remotas…
Entonces no,
continuemos aún
mirando el noticiero de las ocho,
para preguntarnos cuándo
llega el calor,
para mirarnos más allá de los vidrios
de los vasos
durante los aperitivos
e incluso en los días más tristes
démonos una cita.
Cuando fuiste al hospital,
empecé.
Estaba solo en casa
y de vez en cuando bebía,
bebía vino tinto,
me ayudaba a no pensar.
Pensaba solamente en el vino
que estaba en el refrigerador
y que podía arruinarse
si no lo bebía.
Regresaba del paseo de las siete
y bebía,
miraba la tele y bebía,
me hacía el tonto en Internet
y bebía.
Hasta cuando fuiste al quirófano,
yo estaba más agitado que tú
y seguí bebiendo.
Bacardi esta vez.
Mientras el cirujano te abría el pecho,
yo terminé todos los Bacardi
del supermercado.
Así ahora tú
tienes un corazón nuevo
mientras yo,
yo bebo solo Bacardi.
El domingo, si quieres, llévame el desayuno a la cama.
Y hazme ver que eres feliz,
que no necesitas nada más,
que no tienes que salir con amigos
ni que tienes que adelgazar, me gustas como eres.
No tienes que volverte más culta,
te amo incluso cuando haces chistes tontos.
Vivamos este amor como pasa,
sin torturar a las contestadoras,
sin dejar mensajes insistentes.
Me he preguntado muchas veces
si tus ojos están llenos de agua mineral,
si se pueden embotellar.
Quizás contienen poco sodio
y es un agua que también hace bien.
Entonces, sigue igual mirándome
con aquellos ojos azules, incluso cuando duermes,
y vigila mi sueño precario, mis sueños
en los que soy un campeón de tenis, un actor famoso,
o simplemente un hombre feliz,
porque duermes a mi lado.
Cuando tengo miedo, lo sé,
mi corazón, papel de lija,
se vuelve ligero, el ala de una alondra…
Tú síguele el juego,
cuéntale cuánta agua
ha pasado bajo los puentes.
Cuéntale cuánto azul
se abre después del alboroto de los inviernos.
Cálmalo, al igual que a una antorcha
cuando de noche danzan los fuegos fatuos.
Y sostén mi mano cada vez más apretada,
vístela con el guante de la tuya,
luego dime una palabra,
una sola, votiva, próspera,
que me fructifique adentro
como un cerezo al mediodía.
(del libro: "Como un cerezo al mediodía",
Barnacle, 2024, Envío de Alberto Cisnero)
Piergiorgio Viti
(Traducción de Antonio Nazzaro)
Piergiorgio Viti (Sulmona dell’ Aquilla, Italia, 1978). Es Profesor de Literatura, traductor, poeta y escritor de toda la vida. Es uno de los poetas italianos más traducidos en el extranjero (francés, español, rumano, chino, árabe, griego, inglés y sueco) y ganó más de cuarenta premios de poesía en su juventud. Como poeta, tiene en su haber seis publicaciones: “Accorgimenti” (2011, L’arcolaio), “Se le cose stanno così” (Itálica, 2015), “Aperto per inventario” (2019, Pequod), “Ritratti senza andare a capo” (2021, Terra d’ulivi), “Quando l’aria aveva paura di Nureyev” (2021, Terra d’ulivi) y “Dentro al petto mi si muove un canto” (2023, Arcipelago Itaca).
miércoles, 24 de julio de 2024
HABITACIÓN
El matrimonio no es
como una casa, ni siquiera una tienda de campaña
sino una fase previa, algo más frío:
El límite del bosque, donde empieza
el desierto
las escaleras despintadas
de la entrada trasera, en donde nos sentamos
en cuclillas, al fresco, y comemos pochoclo
donde penosamente, y con sorpresa
de haber sobrevivido hasta
este punto
estamos aprendiendo a hacer el fuego
Margaret Atwood
(Ottawa, Canadá, 1939)
Traducción: Ezequiel Zaidenwerg
Pueden LEER la biografía y más
poemas en entradas anteriores de la autora.
lunes, 22 de julio de 2024
SAN VALENTÍN
Ni una rosa roja ni un corazón de seda.
Te regalo una cebolla.
Es una luna envuelta en papel marrón.
Es una promesa de luz
Como la cuidadosa desnudez del amor.
Aquí.
Te cegará con lágrimas
Como un amante.
Hará de tu reflejo
Una foto que flamea de pena.
Estoy tratando de ser sincera.
Ni una bonita postal ni un besograma.
Te regalo una cebolla.
Su beso feroz va a quedarse en tus labios,
Tan posesivo y fiel
Como lo somos nosotros,
Cuando lo somos.
Tómala.
Es un lazo de platino reducido a un anillo de bodas,
Si te gusta.
Letal.
Su aroma se impregnará en tus dedos,
Y en tu cuchillo.
(De Mean Time, 1993)
Talento
He aquí las palabras cuerda floja. Imagina ahora
A un hombre, haciendo equilibrio en el espacio
Entre nuestros pensamientos. Sostiene nuestro aliento.
No hay palabra red.
Lo quieres derribar, ¿no es así?
Adiviné; vacila, pero lo consigue.
Toda la palabra aplausos se escribe sobre él.
(De Standing Female Nude, 1985)
Carol Ann Duffy
(Glasgow, Inglaterra, 1955)
(Versiones de Fernando G. Toledo)
Tomados de eldesaguaderorevista.blogspot.com
Pueden LEER la biografía y más poemas en entradas anteriores de la autora.
sábado, 20 de julio de 2024
Dónde estás tú
Dónde estás tú que recomienzas
tus cabellos como un ramo
sosteniendo los globos y las copas.
La flor de sol se marchitaba
yo te ofrecí las riendas verdes
y tú saltaste al único corazón necesario
sin girar sin vacilar
sin error
quieta
en medio de la sangre de la luz.
de Hierba a la luna, 1935
Ven a dormir conmigo al lecho de estos ancestros
Donde se forjaron los bríos de tu belleza viva.
Regresa, oh absorbente. Ante los velos de tu cadera
Donde me arrodillo
Como no ha rogado nadie
Te ruego que me dejes dormir y mezclarme con los tiempos.
NOCHE
Volverá la noche de invierno
para tenderme a tu lado.
Las fachadas beberán austeras
El claro de luna y su luz
Será expulsada de nuestros besos y brazos.
El cuarto yace solo con las cortinas bajas
Tú yaces sola con los ojos bajos
El claro de luna es el claro de tus brazos
La noche trae su nave imperturbada.
de Las magias, 1972
Valentine Penrose
(Traducción: María Negroni)
Nacida Valentine Boué (Francia; Mont-de-Marsan, Landas; 1898-Chiddingly, Sussex Oriental; 1978) fue una escritora y artista plástica vinculada al surrealismo.
En 1925 se casó con el pintor Roland Penrose, viajó a Egipto, a la India, a España (a vivir en un castillo medieval) y a Londres. Incursionó en el ocultismo. En 1944 se alistó en Algeria como soldado, regresando a Francia durante la liberación. Murió en 1972.
IMAGEN: Valentine Penrose by Eileen Agar
jueves, 18 de julio de 2024
MUJER SALUDANDO A LOS ÁRBOLES
Lo normal es que nadie
se dé cuenta al principio.
Me ha dado por maravillarme
de los árboles del parque.
Algo puedo deciros:
son hermosos
y lo saben.
También están exhaustos,
cientos de años
atascados en el mismo lugar:
hermosos paralíticos.
Cuando estoy a sus pies
sienten que los observo,
miran cómo agito mi necia
mano, y envidian la alegría
de ser un blanco móvil.
Los ociosos que pueblan los bancos
empiezan a fijarse.
«Hay gente para todo…»,
se oye decir.
Muchos tienen los ojos
perdidos en el suelo,
como si de verdad no hubiera nada
que mirar, hasta que
ahí va esa mujer
saludando a las ramas
de estos viejos árboles. Alzad
la frente, amigos, mirad arriba,
puede que veáis más
de lo que nunca os pareció posible,
justo ahí donde algo
la saluda tal vez para decirle
que ha visto lo maravilloso.
Dorothea Tanning (Illinois, 1910, Nueva York, 2012 )
(Traducción: Jordi Doce)
(Via Jonio González)
miércoles, 17 de julio de 2024
TELAR
a la hora de la penumbra cuando solo se escucha
un lejano ladrido de perro incansable retomo
el aparato bendito que me deja oler la lana
y su fragancia a chamiri a jarilla a retortuño
a mullaca -sí tejer es construir el pasado yendo
hacia adelante- corre por la piel un sordo rumiar
de animales andinos en vez de hierba parecen
alimentados a fuerza de silencio miran estoicos
la inmensidad avanzan de a poco dispares
son como cardones con múltiples espinas raídas
por el viento algo de esa aspereza refulge
en cada movimiento de urdimbre a urdimbre
-me hago la idea de sus ofrendas para contrarrestar
la culpa de los cueros esquilados y a la intemperie
abrigándose en infinita espera tibetana- intuyo:
han asumido el sacrificio sin queja para decir
la trama de un lenguaje milenario creo verlo apenas
más allá de este texto en las manos estoy tejiendo
mi amuleto con la desnudez de los redentores
hiedra
un gajo desprendido de la planta madre bastó
para saber que desde mi ventana colgaría
una pequeña selva con el golpe de frescura necesario
para mi cabeza en los últimos días del verano
de dos mil diecinueve olí el follaje un mediodía
y desperté en mi cuerpo fui trepando
por sitios desconocidos coros de vocecitas
acompañaban el vértigo de enredarme nervadura
a nervadura fue cierto lo que dijeron las magas
patología diagnóstico extirpar son palabras
que deberías deglutir hacia el fin de la estación
no voy a contar lo duro que fue ver partir río abajo
a las serpientes luminosas -ellas me protegieron
del intruso hasta asfixiarlo con otras palabras
como tejido anticuerpos obstrucción- en su lugar
eché raíces tiernas como esas hilachas rojizas
que nos raspan los pies al andar por zanjones agrestes
y sirven de nido a microanimales que quieren desovar
ya no puedo salir de mí habito el sistema natural
que me une al mundo y crezco de acuerdo a la luz
(Tomados de la página del Festival
Internacional de poesía de Medellín)
Sabrina Usach
Sabrina Usach nació en Mendoza, Argentina, en 1985. Es poeta, narradora, ensayista y profesora especialista en escritura y literatura. En poesía, publicó Versos para beber hasta, 2012; Muecas de una voz pájara, 2015 y Magnética, 2018, obra con la que obtuvo el Premio Provincial Vendimia de Poesía. Actualmente, es correctora de la editorial independiente Baldíos en la Lengua y coorganiza Cordillera, ciclo de poesía latinoamericano. Ha tomado parte en festivales de poesía en México, Argentina, Bolivia y Cuba. Coordinó, en el período 2016-2018, La Juntada- Festival Internacional de Poesía Joven, las Olimpíadas Colegiales de Poesía y el Café Literario Último Infierno, eventos organizados para la Asociación de Poetas Argentinos. Impulsora de proyectos y concursos relacionados con la producción escrita en diferentes escuelas.
lunes, 15 de julio de 2024
HAY PALABRAS
Ayúdame
Ayúdame a no arrastrar el pasado,
a vaciar mi equipaje en este ligero
peregrinaje.
Enséñame que la vida no es
sólo blanco y negro y que
el cielo no siempre
está gris.
Ayúdame a quitar la venda que
cubre mis ojos y que no me deja
percibir la belleza de la
naturaleza.
Enséñame a no sentirme inferior ni superior,
sólo pretendo ser una más formando
parte de este universo.
Ayúdame a ver el camino de la verdad
a creer en mi destino y a tener:
paz, fuerza
y alegría.
Hay palabras
Hay palabras dulces que no
empalagan a nadie.
Hay palabras amargas que
envenenan a todos.
Hay palabras coherentes que van
con la verdad por delante.
Hay palabras mortíferas cargadas
con balas que siempre dan a la diana.
Hay palabras hermosas que te
hacen sentir como una princesa
en el jardín de las rosas.
Hay palabras crueles que pinchan tus entrañas
como espinas y te dejan llagas
que paralizan tus emociones.
Hay palabras valientes que
alimentan tu coraje.
Hay palabras cobardes que
hacen aflorar tus fobias.
Hay palabras fieles como la sangre que
acude a la herida antes de ser llamada.
Hay palabras traicioneras que te clavan
por la espalda sin dejar rastro
y hunden tus ilusiones.
Hay palabras sabias y agradables que
calman el alma y son el elixir que sana
la conciencia.
Hay palabras vacías y sin sentido que no son más que
palabrerías que vuelan con el viento.
Hay silencios y gestos que por si solos,
hablan más que las palabras.
Hay palabras sagradas que marcan
los límites infranqueables entre
lo tocable y lo intocable.
(De la página del Festival
Internacional de poesía
de Medellín)
Fátima Galia
Fátima Galia nació en Sahara Occidental en 1972. Es poeta y periodista. Autora del único diccionario Hasanía-euskera-castellano. A los 10 años fue a Cuba a estudiar junto con otros niños saharauis. Realizó cursos de Periodismo en la Universidad de Oriente, en Santiago de Cuba. Posteriormente continuó sus estudios periodísticos en Bilbao hasta graduarse y más tarde obtuvo el Máster de Cooperación Internacional al Desarrollo. Su poesía ha sido su forma de denunciar las injusticias sociales, políticas y económicas que afectan a su pueblo natal. Ha publicado los libros de poemas: Lágrimas de un pueblo herido, 2008; Poemas saharauis para crecer. Nada es eterno -Antología poética 1989-2009-, 2009, Cultura oral de los nómadas (Selección de cuentos, poemas, refranes, proverbios y adivinanzas), y el libro La henna y sus maravillas, 2001, en el que refleja las distintas utilidades de la henna en la sociedad saharaui. Actualmente reside en el País Vasco.
sábado, 13 de julio de 2024
FRAGILIDADES
Cada vez que salimos a la calle
caemos de precipicios ajenos
quedamos
a merced del vecino
del peatón
del médico de guardia que ha decidido quedarse en casa
cada día es una sala de espera
con puertas
a los dos lados
sin saber de dónde saldrá el que nos salve
nos dejaron a la intemperie
buscando una luz para ver los eclipses.
Y es que ya no hay circos
en los pueblos
en las estaciones de tren
las carpas se vaciaron
el mago hizo desaparecer al león
y el león al mago.
Pendemos
de un solo miedo
el del creyente.
La solución:
moldear con su arcilla
el busto de Dios
y corregirlo
durante toda la vida
hasta volverlo perfecto.
Designio
Se le cae el pelo
a la reina
se le cae, aunque sea reina.
El designio de la reina es ser calva.
Todas las reinas lo son.
El pelo
del color que sea
con los años se deshace
como ropa de muñeca.
El destino del pelo de la reina
es siempre infinitivo:
vivir para verlo caer
reinar
para que parezca eterno.
(De la página del Festival
Internacional de poesía
de Medellín)
María Casiraghi
María Casiraghi Nació en Buenos Aires, Argentina, en 1977. Es poeta, narradora y periodista. Autora de más de una decena de libros; en poesía los más recientes son: Cóndor, 2018; Música griega, 2019; El Tao de las palabras, 2021 y Escaleras abajo, 2022, todos ellos publicados en editorial es argentinas. Asimismo, es autora de una antología personal titulada Vaca de Matadero, 2017, Ed. Summa, Lima, Perú, y de Selección Poética (Ediciones Caletita, México, 2022).
jueves, 11 de julio de 2024
CIUDAD
Vivo en medio de una ciudad amordazada.
Me cubren edificios que arruinan el sol
con sus lustrosas ventanas de clausura.
Me encadenan calles sin retorno ni partida,
carros que no terminan de pasar.
Una gran avenida que exhala su vaho,
farolas esparciendo partículas de duda.
Un mar de agobio me rodea.
El funesto cortejo de oficinistas,
la ofensa de los bancos y su fila de quejosos.
Torres-grúas como dinosaurios equivocados,
la lluvia metálica sobre paraguas de papel,
porteros de ojos tristes que sonríen
mientras tragan un bocado de malas noticias.
Pasan los mandamases cautivos de sus escoltas,
dejan la estela turbia de su reputación.
Estoy en el ojo del huracán
que bulle del miedo al odio y a la fiesta.
Recluida entre cinco paredes,
calco la imagen del colibrí que se siente libre
volando por las calles de una ciudad amordazada.
(de la Revista Prometeo 119-120,
Festival Internacional de Medellín,
2023)
Luz Helena Cordero
Luz Helena Cordero nació en Bucaramanga, Colombia,en 1961.
Libros publicados: Todavía nos queda la insolencia
(cuentos). Bucaramanga: Ediciones Corazón de Mango, 2022; Unas
cuantas tiernas imprecisiones (crónica). Bogotá: Escarabajo Editorial,
2022; Pliegos de cordel (poesía, ensayo y crónica). Bogotá: Domingo
atrasado, 2019; Eco de las sombras (poesía). Bogotá: Editorial Exilio,
2019 y Uniediciones, 2018; Postal de la memoria (antología personal).
Ibagué: Caza de Libros, 2010; Por arte de palabras (poesía). Bogotá:
Universidad Externado de Colombia, 2009; Cielo ausente (poesía).
Bogotá: Ediciones Sociedad de la Imaginación, 2001; El puente está
quebrado (relatos). Bogotá: Editorial Magisterio, 1998; Canción para
matar el miedo (cuentos). Bogotá: Editorial Magisterio, 1997; Óyeme
con los ojos (poesía). Ciudad de México: Verdehalago, 1996 y Bogotá:
Editorial Trilce, 1996. Sus poemas han sido incluidos en diversas
antologías y traducidos al inglés, portugués, italiano y chino.