jueves, 29 de abril de 2021

BREVIARIO AMARILLO














 

ARCAICO
 
Como trampas inofensivas
se desarman
los días en verano.
 
 
En el hueco del candelabro
coronitas de novia
encendidas.
 
 
 
Demora del tiempo
en el bosque,
la espesura,
cada noche
se vuelve azul.
 
 
 
Trabajadores golondrina
amores golondrina
vida golondrina.
 
 
 
Ladra el manto negro
Aleteo de chingolo
y un aleteo entre las ramas.
 
 
 
Como un bicho muerto
por la luz.
Así.
 
 
 
Al costado de la nieve
los pasos quietos
del silencio.
 
 
 
Corre el viento
mil hojas se abren
en la alcantarilla.
 
 
 
En la orilla, va y viene
una certidumbre agujereada
por la espuma.
 
 
 
En el alambre
un benteveo vibra.
 
 
 
REVELADO GRÁFICO
 
 
Las manos palpan
el fresco vacío
del cuenco de arcilla.
 
 
 
Una figura de cables
tiembla
sobre los postes eléctricos.
 
 
 
Simular efervescencia
sacudiendo el pico
de una botella descartable.
 
 
 
Sólo las figuritas de aúcar
intuyen lo fácil
que es desintegrarse.
 
 
 
Pelea de peces
fuera de estado,
la política.
 
 
 
En mi ciudad
los padres pasean
jaulas con animales
dorados.
 
 
 
Propiedades mínimas
en el pañuelo:
las iniciales bordadas
y uno o dos lágrimas.
 
 
 
LO UNO Y LO OTRO
 
 
Todo arte es inútil.
Muchos dioses son inútiles.
Algunos hombres son magistralmente inútiles.
Pero lo inútil no es la medida de las cosas.
 
 
 
-¿Deberíamos deshacernos
de “amor”? -preguntó
mientras remendaba el lomo
del diccionario.
 
 
 
Si el deseo
se descompone
¿hay que reciclarlo?
 
 
 
Es cierto el río.
Los cuerpos son ciertos.
No obstante, hay ciertos sitios
que son inciertos.
 
 
 
 
Las personas que viven
contrayéndose:
insectos en el fuego.
 
 


DIARIO
 
 
El miedo a la pared
ha terminado
por desmoronarme.
 
 
 
Morder con la facilidad
de un caballo
no siendo
caballo.
 
 
 
Hombre pájaro:
¿cuándo vendrás
a volar mi ventana?
 
 
 
A nuestro breve amor
le pasa como a la oca;
se perdió en el laberinto
y retrocedes 20 casilleros.
 
 
Cuando todo me recuerda
a una canción
desconocida.
 
 
 
Abrir el pico
por donde al alma cabe.
O no.
 
 
 
Ahora solo hay
un ojo nervioso
que busca una boca.
 
 
 
Hacer las historias de amor
No el amor
ni su fre ne sí.
 


 
María Aranguren


 

María Aranguren (Entre Ríos, 1984) es investigadora, escritora e ilustradora. Publicó los libros álbumes: mínimos elementales (2017, Modesto Rimba) y Rara Avis (2019, Wolkowicz) y el libro de cuentos Cacerías en la noche (2019, Escritores Rafaelinos Agrupados y Faber Libros), ganador del Primer Premio Casa del Escritor 2018. Participó como ilustradora en la antología de poesía para niños De los rayos del sol como sogas (2019, Tanta Ceniza).


IMAGEN: La autora, fotografía tomada de su perfil de la página autores de Concordia, donde pueden leer más textos.




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