martes, 5 de julio de 2011

DESPUÉS DE UN GRAN DOLOR




Después de un gran dolor, uno se hace formal
Los Nervios se apoltronan, como Tumbas -
El Corazón ya tieso se pregunta
Si fue Él quien lo pudo soportar,
Si fue Ayer o hace Siglos.

Los Pies, igual a autómatas, recorren -
En el Suelo, en el Aire, en el Vacío -
Un sendero de Bosque
Que ha nacido al descuido,
Resignación de Cuarzo, como piedra -

Es la Hora del Plomo
-Si se la sobrevive, es recordada
Como quien soportó Nieves glaciales
-Frío -al principio- luego Aturdimiento
-Después dejarse ir -




Emily Dickinson (E.E.U.U., Amherst, Massachusetts, en 1830)


(Traducción de Ricardo H. Herrera)





1 comentario:

Pablo Seguí dijo...

Siempre me gustó este poema, que leí antes traducido por Silvina Ocampo. Esta versión es muy, muy linda.