La camelia
no florece todo el año
los botones blancos en lo más alto de las ramas
son brotes de hojas
las hojas son más bellas que las flores
verdeoscuras con su brillo sólido
silbo en una hoja enrollada
hinchando mis mejillas
su son triste
repercute en mi alma montaraz
Tranquilidad de la montaña de invierno
Llegando de un viaje, salir a otro viaje
lo de la tierra, retorna a la tierra
Este jarro, al romperse
se vuelve un trozo de eternidad
El viaje se va llevado por el río
Si extiendo la mano para sacarlo del agua
se transformará en espuma
El sol de otoño se filtra
en mi sombrilla de paja, humedecida por el sueño
HOJAS DE CASTAÑO
Una casa en donde crecen guisantes.
Una mujer de ojos rasgados.
Una noche efímera
como los ojos de los peces.
Se oye la voz de Hera
entre el murmullo de las hojas del castaño.
Amaneció
sin que el ruiseñor dejara de cantar.
La sombra se recostó en el mármol
y se volvió una rosa
(De la ANTOLOGÍA DE LA POESÍA
CONTEMPORÁNEA DEL JAPÓN
(1925-1960), UNAM, México, 2010
Dyunzaburo Nishimaki
(Traducción Atsuko Tanabe y Sergio Mondragón)
Dyunzaburo Nishiwaki fue el primero en introducir el surrealismo al Japón. Nacido en Niigata en 1894, luego de obtener el título de licenciado en economía en la Universidad de Keio, viajó a Inglaterra donde estudió literatura inglesa medieval en la Universidad de Oxford. Durante su estancia en aquel país publicó el libro de poemas Spectrum (1925). A su regreso se hizo profesor de literatura inglesa en Keio.Nishiwaki trató de convertir aquel mundo poético creado por los surrealistas mediante la subconsciencia, en un mundo de belleza poética creado por su propia conciencia y voluntad. Publicó dieciséis libros de poesía publicados. Fue
uno de los críticos literarios más importantes del Japón.
Falleció en 1988.
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