Brillo
Al menos no
estarás ansioso por recogerel coraje
que gotea de la noche de primavera.Se
endurece, cristaliza, asalta las fortalezasde
palabras, tratando de templar la lengua del seductorpara hacer
de ella el único campo desdeñadode tu
inteligencia. Si digo que elecciónes destino,
tu renuncia siempre a medio caminose
convierte en un modelo de moderación; al menos,cuando las
sombras de los árboles se muevanhacia el
meridiano de tu cara, ya no podrás creerque las
palabras son una píldora a ingerir antes de dormir.Escucho una
ligera excitación en tu garganta, pero la mandíbula,en desacuerdo,
suena con un ruido de metal contra metal.Por
momentos acusa nerviosamentea las
piezas que se rebelan contra el cuerpo,como tu
mano, perdida en medio de la mañana,después de
apretar un pecho pequeño, semejante a un pájaro.Alguna vez
tomé el lugar de esas manos torpespara
apaciguar tus nervios, pero capturé asíla niñez
invertida en el límite de la visiónlavando los
negativos en el cuerpo de un doble. Al menosen el
espacio donde mi dedo penetra hay pliegues que se cierranen espiral.
Un tejido, o una funda más pequeña,ciñe tus
órganos más tiernos. La noche, una puerta giratoria,despide
luz, pero en las marcas de las cosasse infla el
terror irreversible, que la piel memoriza. (Del libro homónimo: 150 poetas chinos contemporáneos,Gog y Magog, 2023)Qin Sanshu
(Traducción, selección y biografías:
Miguel Ángel Petrecca)
Qin
Sanshu ( (Xuzhou,
provincia de Jiangsu, 1991) ha publicado un libro de poesía, Si feng zhi
yi lang [Un cuarto
de ola], Taibei, 2019) y numerosas traducciones de poetas en lengua francesa e
inglesa. Ha recibido varios premios por su poesía. Actualmente vive en
Shanghai.
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