¿Recuerdas, mi alma, ese árbol favorito?
Verdes eran las tardes a su vera;
era un ombú, era sagrado, y era
como un hotel variadamente escrito
por los paseantes de otra primavera.
Nosotros no grabamos nuestros nombres;
y sin embargo, cuando todo muera,
¿no quedará un recuerdo de dos sombras
besándose las manos en la hierba,
aunque esas sombras no se nos parezcan?
Las preguntas retóricas no requieren respuesta.
Me alejo para verte en la memoria:
tan joven y en el sol, como en un barco.
Los teólogos pensaron
que el orden y el desorden alababan a Dios
con semejante intensidad.
(Sur, n. 192-193-194, 1961)
J.R. Wilcock (Argentina, Bs.As., 1919- Italia, Lubriano, 1978)
IMAGEN: Ombú argentino.
1 comentario:
Es hermoso el jardín Botánico!
Tuve la suerte de haberme alojado en unos departamentos en buenos aires que quedaban a 3 cuadras de allí..
iba a caminar todas las mañanas..
se lo extraña realmente!
Saludos!
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