Detengan los relojes, desconecten el teléfono
denle un hueso al perro para que no ladre
Callen los pianos y con ese tamborileo sordo
saquen el féretro, acérquense los dolientes
que los aviones sobrevuelen quejumbrosos
y escriban en el cielo el mensaje...
él ha muerto.
Pongan moños negros
en los níveos cuellos de las palomas
que los policías usen guantes
de algodón negro
Él era mi norte mi sur
mi este y oeste
mi semana de trabajo y mi
domingo de descanso
mi mediodía, mi medianoche
mi conversación, mi canción
Creí que el amor perduraría
por siempre.
Estaba equivocado.
No precisamos estrellas ahora...
Apáguenlas todas
Envuelvan la luna
desarmen el sol
Desagüen el océano y
talen el bosque
porque de ahora en adelante
nada servirá.
W.H.Auden( Inglaterra/E.E.U.U.; York, Reino Unido, 1907-Viena, 1973)
(sin mención del traductor)
Stop all the clocks, cut off the telephone.
Prevent the dog from barking with a juicy bone,
Silence the pianos and with muffled drum
Bring out the coffin, let the mourners come.
Let aeroplanes circle moaning overhead
Scribbling in the sky the message He is Dead,
Put crêpe bows round the white necks of the public doves,
Let the traffic policemen wear black cotton gloves.
He was my North, my South, my East and West,
My working week and my Sunday rest
My noon, my midnight, my talk, my song;
I thought that love would last forever, I was wrong.
The stars are not wanted now; put out every one,
Pack up the moon and dismantle the sun.
Pour away the ocean and sweep up the wood;
For nothing now can ever come to any good.
2 comentarios:
Aunque suene terrible, parece que un poeta puede hace que el dolor se transforme en algo hermoso.
De eso se trata entre otras cosas la poesía que suele ser "la conciencia de la felicidad perdidad" como decía mi maestro. Gracias por pasar, Jorge.
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