ÁLVARO DE CAMPOS
Todas las cartas de amor son
ridículas.
No serían cartas de amor si no fueran
ridículas.
También escribí en mi tiempo cartas de amor,
como las demás,
ridículas.
Las cartas de amor, si hay amor,
tienen que ser
ridículas.
Pero, al final,
sólo las criaturas que nunca han escrito
cartas de amor
son las que son
ridículas.
Quién volviera al tiempo en que escribía
sin darme cuenta
cartas de amor
ridículas.
La verdad es que hoy
mis recuerdos
de aquellas cartas de amor
son los que son
ridículos.
(Todas las palabras esdrújulas,
igual que los sentimientos esdrújulos*,
son naturalmente
ridículas.)
*Juego de palabras o paronomasia, intraducible:
el portugués esdrúxulo significa también extravagante
Fernando Pessoa
Fernando António Nogueira Pessoa (Lisboa, 1888- id., 1935)
(Traducción de Ángel Crespo)
Todas as cartas de amor são
Ridículas.
Não seriam cartas de amor se não fossem
Ridículas.
Também escrevi em meu tempo cartas de amor,
Como as outras,
Ridículas.
As cartas de amor, se há amor,
Têm de ser
Ridículas.
Mas, afinal,
Só as criaturas que nunca escreveram
Cartas de amor
É que são
Ridículas.
Quem me dera no tempo em que escrevia
Sem dar por isso
Cartas de amor
Ridículas.
A verdade é que hoje
As minhas memórias
Dessas cartas de amor
É que são
Ridículas.
(Todas as palavras esdrúxulas,
Como os sentimentos esdrúxulos,
São naturalmente
Ridículas.)
IMAGEN: El poeta en un café de Lisboa.
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